Qué hacer para que te despidan improcedentemente: Consejos y precauciones

Si estás buscando una manera de ser despedido de tu trabajo de forma improcedente, es importante que sepas que hay ciertas acciones que pueden llevarte a esa situación. Aunque no es recomendable buscar activamente un despido, hay situaciones en las que puede ser la mejor opción para ambas partes. En este artículo, te explicaremos qué hacer para que te despidan de forma improcedente.

¿Despido Impropcedente? Conoce Tus Derechos y Cómo Actuar

Lo Esencial en Breve

• Definición Clara: Un despido se considera improcedente cuando la empresa no justifica la causa legalmente o no sigue los procedimientos formales, abriendo la puerta a una indemnización o readmisión.
• Impugnación es Clave: Si crees que tu despido es improcedente, tienes un plazo de 20 días hábiles para impugnarlo, comenzando con un acto de conciliación. No dejes pasar el tiempo, ¡es crucial!
• Consecuencias para la Empresa: Si se declara improcedente, la empresa debe decidir entre readmitirte en tu puesto con salarios de tramitación o pagarte una indemnización.

En el complejo laberinto de las relaciones laborales, ser despedido es, sin duda, uno de los momentos más estresantes. ¿Verdad? La incertidumbre se apodera de nosotros, y es natural preguntarse: ¿mis derechos están protegidos? ¿Realmente la empresa puede hacer esto? Hoy, vamos a desglosar un concepto crucial que puede marcar una gran diferencia en tu futuro: el despido improcedente. Imagina por un momento que estás en tu trabajo, haciendo tu labor, y de repente, zas, te comunican que se acabó. Una situación dura, ¿eh? Pero la cosa no termina ahí. La ley, afortunadamente, te ampara si ese cese no se ajusta a lo que debería ser. Así que, ¿qué hacemos? Pues, lo primero es informarse bien para saber cuándo un despido se considera improcedente y cómo puedes defenderte. ¡Vamos a ello!

¿Qué es Exactamente un Despido Improcedente?

Piensa en un despido como una moneda con tres caras: puede ser procedente, improcedente o nulo. Nos vamos a enfocar en la del medio, la improcedente. Un despido es declarado improcedente cuando el empleador decide terminar la relación laboral de forma unilateral, pero, ojo, sin tener una causa legal que lo justifique o sin cumplir con las formalidades exigidas por la ley. Es como si te dijeran «hasta aquí llegamos», pero sin un buen motivo o sin seguir los pasos correctos. ¿Sabes? Esto es súper importante porque no todos los despidos conllevan indemnización, pero este tipo sí.

Las Raíces de la Improcedencia: ¿Por qué mi despido sería injusto?

La improcedencia no se inventa de la nada; tiene sus razones de peso, según lo que establece el Estatuto de los Trabajadores. Y aquí es donde la cosa se pone interesante, porque las causas pueden ser de dos tipos: de contenido (lo que motiva el despido) o de forma (cómo se notifica).

Causas de Contenido: Cuando el Motivo no Cuadra

Aquí la empresa alega una causa, pero la realidad es que no se sostiene. O, peor aún, no existe una causa real y justificada. Por ejemplo:

• Falta de causa real o justificada: Quizá te despiden por «bajo rendimiento», pero la empresa no tiene pruebas sólidas que demuestren que tu desempeño era realmente deficiente. O te despiden por una falta que no es lo suficientemente grave para justificar la expulsión.
• Despido por baja médica: Si bien la baja médica por sí misma no es una causa de despido improcedente, si la empresa utiliza tu incapacidad temporal como el verdadero motivo de tu cese, podría considerarse improcedente. ¿Te suena esto a vulneración de derechos? ¡Pues sí!
• Discriminación o vulneración de derechos fundamentales: Si el despido se debe a razones discriminatorias (sexo, raza, religión, orientación sexual, etc.) o atenta contra tus derechos fundamentales, entonces, amigo mío, estamos hablando de un despido improcedente, o incluso, nulo.

Un caso clásico es el de un despido disciplinario donde la empresa no puede probar la falta grave o muy grave que te imputa. Si no hay pruebas, o las pruebas no son lo suficientemente contundentes, el despido puede caerse.

Causas de Forma: Cuando el Procedimiento Falla

A veces, el problema no es el «porqué», sino el «cómo». Si la empresa no sigue los pasos legales al pie de la letra, el despido, aunque tuviera una causa, puede ser declarado improcedente. Esto es algo que los abogados laboralistas ven a menudo. ¡Presta atención a esto!

• Ausencia de carta de despido o sin justificación: La ley es clara: la notificación debe ser por escrito, detallando las causas que motivan la extinción del contrato. Si no te entregan una carta, o la carta no especifica los motivos, ¡es improcedente! Imagínate que te dicen verbalmente «no vengas el lunes», ¿cómo pruebas eso?
• Incumplimiento del preaviso: En ciertos tipos de despidos, como el objetivo, la empresa está obligada a darte un preaviso (generalmente 15 días). Si no lo hacen, es una señal de alarma.
• No poner a disposición la indemnización: En el caso de despidos objetivos, la indemnización debe ponerse a disposición del trabajador en el momento de la comunicación. Si no lo hacen, y no es por falta de liquidez debidamente justificada, el despido se vuelve improcedente.

Es como un juego de ajedrez donde cada movimiento debe ser preciso. Si la empresa comete errores formales, te da una ventaja para impugnar.

El Camino para Reclamar un Despido Improcedente

Si sientes que tu despido no fue justo, no te quedes de brazos cruzados. Tienes derechos, y es vital actuar rápido. El tiempo es oro en estos casos.

Los Primeros Pasos Cruciales: ¡No te precipites!

1. Solicita una explicación por escrito: Asegúrate de que te entreguen la carta de despido con las causas. Este documento es tu punto de partida.
2. Revisa tu contrato de trabajo: Familiarízate con las cláusulas y condiciones que tenías.
3. Asesoramiento legal: Este es, honestamente, el paso más importante. Contacta con un abogado laboralista. Ellos son los expertos y saben cómo navegar estas aguas. Tienes un plazo muy corto, 20 días hábiles desde la fecha de efectos del despido, para impugnarlo. Un abogado te guiará en este proceso, desde la recopilación de pruebas hasta la negociación o el juicio.

El Proceso de Impugnación: Paso a Paso

Acto de Conciliación: El Primer Asalto

Antes de llegar a los tribunales, la ley exige intentar un acuerdo. Se solicita un acto de conciliación ante el Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación (SMAC). En esta fase, se busca llegar a un acuerdo entre el trabajador y la empresa para evitar el juicio. ¿Y sabes qué? Muchas veces se logra un pacto aquí.

En este acto, pueden ocurrir varias cosas:

• Con acuerdo: Se llega a un pacto, que suele implicar el pago de una indemnización por despido improcedente.
• Sin acuerdo: Si no hay entendimiento, se cierra sin acuerdo y se abre la vía judicial.

Demanda Judicial: Si la Conciliación Falla

Si la conciliación no funciona, el siguiente paso es presentar una demanda ante el Juzgado de lo Social. Aquí es donde se exponen los motivos por los cuales consideras que el despido fue improcedente y se presentan todas las pruebas y evidencias que tengas. Es vital contar con un buen abogado que prepare la demanda y te represente en el juicio.

La lucha legal por los derechos laborales puede ser un camino largo y desafiante.

¿Y Después Qué? Consecuencias del Despido Improcedente

Si un juez declara que tu despido fue improcedente, la empresa se encuentra en una encrucijada y debe tomar una decisión crucial.

La Elección de la Empresa: Readmisión o Indemnización

La empresa tiene un plazo de 5 días desde la notificación de la sentencia para optar por una de estas dos opciones:

1. Readmisión del trabajador: Esto significa que la empresa debe reincorporarte a tu puesto de trabajo en las mismas condiciones que tenías antes del despido. Además, tienen que abonarte los «salarios de tramitación», que son la suma de los salarios que dejaste de percibir desde la fecha del despido hasta tu readmisión (o hasta que encontraste otro empleo, si fue antes).
2. Pago de una indemnización: Si la empresa no quiere readmitirte, debe pagarte una indemnización. La cuantía varía según la antigüedad y la fecha de inicio de tu contrato.

Veamos una tabla para que quede más claro cómo se calcula esta indemnización, porque es un dato que, honestamente, a todos nos importa mucho:

Cálculo de la indemnización por despido improcedente según la fecha de contrato.

Es importante recordar que esta indemnización por despido improcedente está exenta de tributación en el IRPF hasta el límite legal. ¡Un dato no menor, de verdad!

Derecho a la Prestación por Desempleo (Paro)

Sí, tienes derecho a solicitar la prestación por desempleo (el paro), siempre y cuando cumplas con los requisitos de cotización establecidos. Esto aplica tanto si la empresa te readmite (y luego finaliza la relación) como si te paga la indemnización. Es una red de seguridad importante en momentos de transición.

¿Se puede «provocar» un despido improcedente?

Esta es una pregunta que a veces surge, ¿sabes? Algunos trabajadores, en situaciones de inconformidad, buscan formas de que la empresa los despida para poder acceder al paro o a una indemnización, en lugar de una baja voluntaria que no da derecho a estas prestaciones. Sin embargo, hay que ser muy cautelosos aquí. Intentar provocar un despido de mala fe puede volverse en tu contra, transformándose en un despido disciplinario, lo que te dejaría sin indemnización. Por ejemplo, si un trabajador comete faltas intencionadamente para que le despidan, y la empresa logra demostrar esa mala fe, el despido podría ser considerado procedente. La clave está en la legalidad y la justificación real.

De hecho, se recomienda encarecidamente no buscar este camino de «provocar» un despido. Es mejor asesorarse legalmente sobre cómo gestionar una situación laboral insostenible. A veces, la negociación de una rescisión de contrato de mutuo acuerdo, aunque con una indemnización menor, puede evitar problemas legales mayores y brindar una salida más limpia y segura.

Para entender mejor la complejidad y las posibles trampas en un despido, especialmente cómo evitar que te engañen, te recomiendo ver el siguiente video. ¡Puede darte una perspectiva muy útil!

Consejos para afrontar un despido y evitar ser engañado.

Consideraciones Finales: Tu Futuro Laboral

Enfrentar un despido es un desafío, sin duda. Pero conocer tus derechos y cómo actuar puede transformar una situación desalentadora en una oportunidad para defender lo que te corresponde. Recuerda, la ley laboral está ahí para proteger al trabajador, y un despido improcedente es una clara vulneración de esa protección. No te quedes con la duda; busca siempre el asesoramiento de profesionales.

Comprender la diferencia entre despido sin causa y despido improcedente.

Los errores en los despidos por parte de las empresas son más comunes de lo que uno podría pensar. A veces, es por desconocimiento, otras por un mal procedimiento. Pero, al final del día, esos errores se traducen en derechos para ti como trabajador. ¡No los dejes escapar!

Preguntas Frecuentes

¿Cuál es el plazo para reclamar un despido improcedente?

Tienes un plazo de 20 días hábiles para impugnar el despido, contados a partir del día siguiente a la fecha de efectos del despido. Es un plazo muy ajustado, así que actúa con rapidez.

¿La indemnización por despido improcedente tributa?

La indemnización por despido improcedente está exenta de tributación en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) hasta el límite legal establecido por el Estatuto de los Trabajadores. Cualquier cantidad que exceda este límite sí estará sujeta a tributación. Para beneficiarse de esta exención, el despido debe ser reconocido como improcedente mediante un acto de conciliación o una sentencia judicial.

¿Qué son los salarios de tramitación?

Los salarios de tramitación son las cantidades que el trabajador deja de percibir desde la fecha del despido hasta que es readmitido en su puesto de trabajo o hasta que se le notifica la sentencia que declara el despido improcedente. La empresa debe abonarlos si opta por la readmisión.

¿Puedo cobrar el paro si mi despido es declarado improcedente?

Sí, el despido improcedente te da derecho a solicitar la prestación por desempleo, siempre que cumplas con los requisitos de cotización establecidos por la ley.

Conclusión

Comprender el concepto de despido improcedente, sus causas y las vías para reclamar es fundamental para cualquier trabajador. No es solo un término legal, sino una herramienta de protección de tus derechos laborales. Si alguna vez te encuentras en esta situación, recuerda que no estás solo y que tienes mecanismos legales para defenderte. La clave es la información y el asesoramiento profesional. ¡Tu tranquilidad y tu futuro laboral bien valen el esfuerzo!